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מארי

DEBORAH (1/2)

En aquél tiempo Deborah profetisa, i Juez en Israel. Se sentaba bajo la palmera de Deborah, entre Ramá y Betel, en la montaña de Efraím; y los israelitas subían donde ella en busca de justicia…

Aquél día Deborah i Baraq entonaron este cántico:
Al soltarse en Israel la cabellera,
Cuando el pueblo se ofrece voluntario.
¡Bendecid a Yahveh!
¡Escuchad, reyes!
¡Prestad oído, príncipes!
Yo a Yahveh, yo voy a cantar.
Tocaré el salterio para Yahveh, Dios de Israel.

Cuando saliste de Seír, Yahveh,
Cuando Avanzaste por los campos de Edom,
Tembló la tierra, gotearon los cielos,
Las nubes en agua se fundieron.

Los montes se licuaron delante de Yahveh, el del Sinaí,
Delante de Yahveh, el Dios de Israel.

En los días de Samgar, hijo de Anat,
En los días de Yael, No había caravanas;
Los que hollaban calzadas
Marchaban por senderos desviados,
Vacíos en Israel quedaron los poblados
Vacíos hasta su despertar, oh, Deborah,
Hasta tu despertar, oh madre de Israel,

Se elegían dioses nuevos;
por entonces la guerra en las puertas;
ni un escudo se ve ni una lanza
para cuarenta mil en Israel.

Mi corazón con los jefes de Isrel,
Con los voluntarios del pueblo.
   ¡Bendecid a Yahveh!

Los que cabalgais en blancas asnas,
Los que os sentais sobre tapices,
Los que vais por el camino, cantad
Al clamor de los repartidores
Junto a los abrevaderos.

Allí se cantan los favores de Yahveh,
Los favores a sus poblados de Israel,
(Entonces el pueblo de Yahveh bajó
A las puertas)

¡Despierta, Deborah, despierta!
¡Despierta, despierta, entona un cantar!
¡Ánimo! ¡Arriba Baraq!
¡Apresa a los que te apresaron, hijo de Abinoam!

Entonces Israel bajó a las puertas,
El pueblo de Yahveh bajó por é, como
Un héroe.

Los principales de Efraím en el valle.
Detrás de ti Benjamín entre tu gente.

De Makir han bajado capitanes,
De Zabulón los que manejan cetro.
Los jefes de Isacar están con Deborah
y Neftalí, con Baraq, en la llanuera, lanzado tras sus huellas.

En los arroyos de Rubén,
Magnánimas decisiones,
¿Por qué te has quedado en los corrales,
 Escuchando silbidos entre los rebaños?
(En los arroyos de Rubén
Magnánimas decisiones)

                                           Biblia de JERUSALÉN

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